lunes, 28 de noviembre de 2011

Oración del 25 de noviembre de 2011


A LA TARDE TE EXAMINARÁN EN EL AMOR
                                                                   San Juan de la Cruz

Himno: Rendez grace au Seigneur car il est bon eternelle est son amour alleluia
            Rendez grace au Jesús ressucité eternelle est son amour alleluia
            Rendez grace au l’Esprit cereateur eternelle est son amour alleluia
            ( Demos gracias al Señor porque es bueno, porque es eterno su amor alleluia
            Demos gracias a Jesús resucitado, porque eterno es su amor alleluia
            Demos gracias al Espíritu de amor porque eterno es su amor alleuia )
Canto: Christe salvator filius Patris dona nobis pacem
          ( Cristo salvador Hijo del Padre danos la paz )

Meditación:
          Esta es la confesión del apóstol Pedro a Jesús: Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios. Le reconoce cómo el salvador, el único que tiene palabras de vida eterna. Pero Pedro es una criatura y, en medio de esta lucidez espiritual, vive también su debilidad: se queda dormido rezando, niega a Jesús... A veces, se siente muy fuerte, y es cuando la limitación le lleva a fijar su mirada en Jesús como el salvador y necesitar de Él. Las palabras más bonitas que Pedro le dirige a Jesús, tras la pregunta ,por tres veces, de Jesús ¿“me amas?”, son “Señor, Tú lo sabes todo, Tu sabes que te amo” Jesús no le pregunta tres veces para asegurarse del amor de Pedro, sino para que él sea consciente de su amor profundo por Jesús a pesar de su debilidad. Y Cristo le da una misión, que no está centrada en sus capacidades, sino en su amor. Eso es lo que nos preguntará Dios cuando terminemos nuestro camino por esta tierra. No cuánto hemos orado, cuantas misas hemos celebrado...sino cuánto hemos amado. Y ¿Cómo amar a Cristo? “Quien no ama a su hermano al que ve, no puede amar a Dios a quien no ve”, dice el apóstol Juan. Hoy, cada día, nos pregunta a cada uno: ¿me amas? Deseemos que nuestra respuesta no sea de palabra, sino una vida entregada a Cristo a través de nuestros semejantes que mas lo necesitan. En una vida así, la debilidad es inundada por la confianza de Cristo en cada uno, y podremos contestar: “Señor, Tú lo sabes todo, Tú sabes que te amo. No como yo quisiera, pero te amo”.


Del  libro de los Salmos  Alleluia

El Señor modeló  cada corazón y comprendes todas sus acciones ( 32 )
Tómame de la mano y condúceme firmemente todos los días de mi vida
Tú conoces hasta el fondo de mi alma, condúceme por el camino del amor. ( 139 )
Dichoso el que cuida del pobre y del desvalido,
el Señor lo guarda y conserva en vida para que sea dichoso en la tierra.( 40 )
Tu amor y tu ternura, Señor son eternos; muéstrame tus caminos, Señor. ( 25 )

Lectura bíblica:
          “ Y entonces dirá a los de su derecha: “Venid, benditos de mi Padre y recibid la herencia( ... ). Porque tuve hambre y me distéis de comer, tuve sed y me disteis de beber, era forastero y me acogisteis, estuve desnudo y me vestisteis; estuve enfermo y preso y me visitasteis. “ Entonces ellos le dirán: “¿Cuándo te vimos desnudo y te vestimos...?” Y Él les dirá: “Os aseguro: cada vez que lo hicisteis a cada uno de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis.”   De Mt  25, 31 – 46

Canto: Ubi caritas et amor; ubi caritas Deus ibi est.
          (Donde hay caridad y amor allí está Dios)
Silencio. Kryrie eleison( Oración común cantada ) Padre Nuestro.

 

Oración final:

Cristo fue quien te amó primero. Ahí está el sentido de tu vida: ser amado para siempre, amado hasta la eternidad, para que a tu vez, llegues a morir de amar. Sin amor, ¿para qué existir? En adelante, en la oración como en la lucha, nada es grave sino perder el amor. Si oras, es por amor. Si luchas por  devolver un rostro humano al hombre explotado, es por amor. ¿Te dejarás introducir por este camino? ¿Vivirás a Cristo para los hombres?
Cantos: Oh oh oh oh Jubilate Deo omnis terra
            Oh oh oh oh Alleluia alleluia
            Notre âme attend le Seigneur en lui la joie de notre coeur
            ( Nuestra alma espera al Señor, en Él el gozo de nuestro cozazón )
            Toi tu nous aimes source de vie ( Tú nos amas , fuente de vida )
El alma que anda en amor ni cansa ni se cansa
            El alma que anda en amor ni cansa ni se cansa Oh oh oh oh oh oh







Introducción bíblica del retiro del 19 de noviembre de 2011


En tiempos de crisis la invitación a la esperanza
“Algo nuevo está brotando ¿no lo notáis? Is 43,19


Estamos en tiempo de crisis. Basta abrir un telediario para percatarse de ello. En el opulento y rico occidente los mercados se tambalean, la economía se desmorona.  Mas allá de nuestras fronteras en Africa, las hambrunas y las guerras. Hacia Oriente, las luchas entre árabes e israelíes…y más allá Afganistán y todo un mundo que no obstante busca se feliz , clama por la paz, la justicia. ¿Que hacer? Nos sentimos impotentes para  dar respuesta. ¿No hay quien pueda cambiar esta situación económica mundial, que genera tantas desigualdades económicas, que abre cada  vez más la brecha entre los ricos y los pobres? Tal vez ha podido brotar en nosotros la pregunta ¿dónde está Dios ¿ el Dios de los pobres cuando estos son cada vez más pobres y los ricos más ricos? ¿ qué hace la Iglesia? …En esta situación necesitamos profetas que abran caminos de esperanza, que orienten sobre el camino a seguir para responder al sueño de Dios sobre la humanidad.  Los hubo entre nosotros…..en otras épocas. Admiramos a Ghandi, a Nelson Mandela, a tantos otros que trabajaron por hacer un mundo mejor. Hoy tal vez no sean personas sino grupos los que nos van diciendo otro mundo es posible, no hay que desanimarse. El 15-M entre otros, con sus ambigüedades ¿no encierran un sigo de esperanza? ¿no es un grito que clama por la urgente necesidad de un cambio de economía de funcionamiento mundial?

Hubo un tiempo en la historia de Israel que evoca el nuestro, es el Exilio en Babilonia. En el destierro todas las referencias que daban seguridad al pueblo de Dios fueron cayendo un tras otras, la capital Jerusalén destruida, el rey destronado, y el Templo, lugar privilegiado de la presencia de Yahvé también en ruinas…y los fieles desterrados a miles de Kilómetros.  ¿Dónde están las promesas que daban respuesta a los sueños, que a todos nos habitan, de vivir en una tierra en la que todos nos amemos y vivamos felices? El profeta llamado de la Consolación o II Isaías nos ofrece en los capítulos 40 a 55 los medios que conducen a vivir con esperanza en medio de una situación de crisis. El profeta invita a abrir los ojos para ver que “algo nuevo está brotando”.

Los cristianos creemos que el Dios de Jesús está empeñado en crear ese mundo nuevo. La Escritura lo presenta bajo la forma de un banquete en el cual el Padre sentará en su mesa a todos sus hijos e hijas. A su derecha, Jesús, el primogénito, y junto a él en lugar preferencial los pobres, los desvalidos, los que el mundo desprecia pero Dios privilegia. Al final de los tiempos los cielos nuevos y la nueva tierra serán una realidad, es el objeto de nuestra esperanza, esperanza activa. ¿Cómo preparar como cristianos ese cielo nuevo y esa tierra nueva?..

Dios que es la eterna novedad nos invita a tener los ojos puestos en lo nuevo que El va creando a nuestro alrededor: una “nueva alianza”, un “corazón nuevo”, “un nuevo mandamiento”, una “nueva criatura”. Lo nuevo es siempre algo bueno, algo mejor que lo anterior, Dios que conduce la historia nos va revelando progresivamente aspectos de su bondad, belleza, y vida que nuestros ojos tienen dificultad para percibirlos de golpe.Lo hace al ritmo de la historia, de los acontecimientos históricos. ¿Cómo discernir y percibir esa novedad? ¿Novedad que  estimula la alegría, el bienestar?  Las orientaciones del profeta a su pueblo pueden sernos válidas para nosotras hoy.

1. Consolad, consolad a mi pueblo dice el Señor. Is 40,1.

El profeta de entrada nos invita al gozo  La frase evoca la de Teresa de Jesús “Tristeza y melancolía fuera de la casa mía” o el “No temáis de la mañana de la Resurrección. Nuestro Dios viene a consolarnos de las situaciones de opresión y de dolor. Tras la tragedia de la muerte en cruz de Jesús  y el consiguiente desconcierto de los discípulos y discípulas el mismo Señor resucitado se acerca a quienes andaban escondido por miedo. “ No temáis, soy yo”. La expresión  “no temáis” es una de las más repetidas en la Escritura.
El profeta anima a su pueblo poniendo de relieve la compasión de Dios. En tiempos de desolación Dios no nos abandona, desea consolarnos. Dios está cerca de los que gritan. En el Exilio el pueblo grita como gritó antaño en la opresión de Egipto. Ahora la situación ha cambiado sufren la opresión de los babilonios, pueblo, también potente conquistador de Jerusalén, destructor de su capital y del Templo que atribuye sus victoria a su Dios Marduc. El pueblo aplastado ve a Marduc el dios de los vencedores como el gran Dios.¿donde ha quedado para ellos su Yahvé el que les sacó de Egipto?. En boca del profeta irrumpe de nuevo la voz de Yahvé para anunciar que está en medio de su pueblo acompañándolo siempre. Del mismo modo que le acompañó antes, ahora también está con ellos. Esta experiencia de creer que el Dios que salvó, salva en el presente y salvará  en el futuro forma parte de la Historia de la Salvación.

Los que acogen el mensaje son los llamados “pobres de corazón”, gente que sufre despojada de cuanto había sido objeto de su esperanza, la tierra, el rey, el Templo, pero gente que en lo hondo del corazón guarda la experiencia de Dios que escucha el grito de los pobres y confía en Dios. Quién  les salvó una vez de la opresión también les salvará en la nueva situación. Los pobres de corazón esperan, porque hacen memoria de un pasado que fue liberador y desde ese pasado encuentran sentido en el presente y se proyectan hacia un futuro nuevo y mejor.

Otros textos pueden ayudarnos a evocar en la memoria del pasado la ternura de Dios.  “Aunque una madre olvide al hijo de sus entrañas yo no te olvidare dice el profeta”. Is 49,14 y ss .O este otro precioso texto. “No temas gusanito de Jacob oruga de Israel, yo mismo vengo en tu ayuda” Is 41,14. Los pobres de Yahvé de otro tiempo, nos invitan a entrar en nosotros para evocar encuentros gozosos con el Señor a lo largo de nuestra historia pasada, aquellos momentos en que algo nuevo surgió en nosotros y cuyo recuerdo continua dando sentido al presente y nos anima para continuar en el futuro. 


2. Bajar al propio pozo.: No temas… tú eres valioso y yo te quiero Is 43,1-4.

El profeta en situación de crisis nos invita a bajar al propio pozo, a la interioridad para percibir en lo hondo, lo que un día fue verdad,  y está como dormido. Es tal vez la experiencia de un encuentro único en un momento determinado de la vida, o la experiencia de una cercanía de Dios que nos lleva como en brazos,  como un amante que se ocupa permanentemente de nosotros y nos ama y acompaña siempre aunque nos desviemos de El.

Descender al propio pozo es volver al origen de nuestra existencia, a ese más íntimo a mi que yo mismo donde todo y siempre está en paz según la expresión de Jung.  La lectura detenida del siguiente texto nos permite ver el movimiento de hacer memoria del pasado para dar sentido al presente y abrirse hacia el futuro con esperanza:

“Y ahora así dice el Señor, El que te creó Jacob El que te formó, Israel: No temas, que te he redimido, te he llamado por tu nombre, Tú eres mío. Cuando cruces las aguas, yo estaré contigo, la corriente no te anegará; cuando pases por el fuego, no te quemarás, la llama no te abrasará. Porque yo soy el Señor, tu Dios, el Santo de Israel, tu salvador. Como rescate tuyo entregue a Egipto, a Etiopía y Sabá a cambio de ti; porque te aprecio y eres valioso y yo te quiero. no temas que contigo estoy” . Is 43,1-4

Es como si Dios quisiera seducir de nuevo a su pueblo alejado aunque no por eso menos amado
“Y ahora escucha, Jacob Siervo mío Israel mi elegido Así dice el Señor que te hizo, que te formó en el vientre y te auxilia No temas, siervo mío Jacob mi cariño, mi elegido Voy a derramar agua sobre el sequedal…Is. 44,1-3

El profeta va desgranando imágenes de Dios nuevas…un Dios que desciende siempre para acercarse a nosotros en nuestras necesidades y emplea el lenguaje que nos conviene para entenderle. Dios que se va manifestando poco a poco como amor que desciende a la historia y vida de los hombres hasta que en el momento supremo de la historia se encarna  y es “Dios con nosotros” .En Jesús de Nazaret, en su vida, muerte y resurrección se nos revela la profundidad de su inmenso amor hacia todas y todos”. “ Tanto amó Dios al mundo que le dio a su Hijo Único”.Jn 3,16. Un amor que da y se da  hasta el extremo.

Lo esencial es invisible a los ojos, pero no al corazón. En el interior de sí misma, escuchó Maria de Magdala que el resucitado la llamaba por su nombre y así  reconoció vivo a quien creía muerto. Jn

Pero para entrar en el hondón, y percibir lo esencial necesitamos silenciar otros ruidos. En lo hondo del corazón es posible percibir los deseos que tienden  a buscar la fuente de donde mana la vida, en nuestro caso de creyentes y cristianos esa fuente es un Tú personal,  al que llamamos el Dios de Jesús. Adentrarse en el hondón supone dejar lo que satisface inmediatamente a los sentidos y entrar en otra dimensión en la que nos habita el Espíritu. Nos da miedo. No obstante las reiteradas llamadas e la Escritura al  “no temáis”, nos cuesta entrar en nosotros. Tendencia humana en cuyo fondo radica el deseo de querer bastarnos por nosotros mismos, de ser como dioses, de ahí la gran tentación de creer que vemos bien y la gran invitación de Isaías en su época y de Jesús más adelante a que reconozcamos nuestra ceguera.


3. Tomar conciencia de la propia ceguera: “Sordos escuchad y oíd; ciegos, mirad y ved” Is 42,18-25

Comenta Shökel a propósito de esta frase: “El pueblo seguía ciego, sin mirar el verdadero sentido de la historia, por eso ha sido castigado con el destierro y todavía no acaba de entender” .

Lo que nos impide percibir las trazas de Dios en la historia humana, su presencia amorosa permanentemente en ella invitándonos a colaborar en la humanización, es nuestra ceguera. Tendemos a confundir la realidad con nuestra visión de la misma. Tentación de siempre. Jesús lo pone de relieve en sus controversias con los dirigentes judíos. “ Si estuvierais ciegos , no tendríais pecado; pero como decís que véis, vuestro pecado permanece” Jn 9, 41. José Saramago, en su novela “ Ensayo sobre la ceguera “publicada en l995, relata como una extraña ceguera azota a un país. A medida que aumenta el mal de la ceguera, las personas se convierten en presas de los más bajos instintos del ser humano llegando a extremos terribles. La perdida de la visión es pérdida de la razón que olvida la solidaridad, el deber. La sola persona que se libra del contagio de la ceguera, y permanece con la visión justa de la realidad , sufre al ver las barbaridades que los otros van cometiendo.  Aludiendo a la realidad actual M. Ramirez Premio Nóbel en 1998 “Yo creo que la gente se está volviendo ciega porque no se da cuenta de que nuestra forma de vivir es totalmente errónea y nos lleva al desastre”

Somos ciegos, tenemos que tomar conciencia de ello. De ahí la necesidad de aplicar la sospecha. Nos han educado  para sospechar de los otros, nunca de nosotros. Es la tentación de los fariseos.
Sólo siendo conscientes de la propia ceguera es posible gritar “Señor que vea” como sucedió en los varios casos en que Jesús devuelve la vista a los ciegos y pueden ver la realidad en lo que tiene de más esencial. Los ciegos curados en el evangelio dan muestras de una gran libertad para ir contra corriente de la gente de la época. La libertad es la condición para elegir lo que mas nos conviene, y lograr el fin que nos hemos propuesto en la vida. En nuestro caso es siempre un bien para los demás. , una mayor humanización, un lugar donde se vida en paz, en armonía, en amor como hermanas y hermanos hijas e hijos de un mismo Padre Madre de todas y todos.

La ceguera del corazón nos impide percibir los verdaderos valores de la humanidad y hasta los signos de la presencia de un Dios siempre mayor que se va revelando siempre de modo nuevo. Nuestra tendencia es asirlo en lo conocido y él se nos revela siempre inasible en lo nuevo. El pueblo de Israel se había asegurado una imagen de Dios que bendice a sus fieles con muchas tierras, muchos bienes y muchos hijos, en el Exilio esa imagen cae por tierra y solamente los que aceptando su ceguera se abren a lo nuevo van conociendo otra imagen mucho mas tierna de Dios, la de un Dios cercano que sufre con los que sufren, un siervo humillado como lo estaba siendo el pueblo en aquel momento, pero un Dios siempre mayor y que tira el bien del mal, dueño de todo. Su plan de salvación se va desplegando armónicamente a lo largo de la historia humana. Su sueño de sentarnos a todos en su mesa se va haciendo  realidad poco a poco en contacto con los acontecimientos. Nuestro Dios está presente en la historia, fecundándola. Y nos invita a colaborar con él estando presentes en ella caminando con los ojos y el corazón bien abiertos para dejarnos sorprender siempre de nuevo con los signos de su presencia amorosa que nos recrea permanentemente.

El mensaje es una invitación a mirar y a caminar por la vida con los ojos abiertos, a vivir una mística de los ojos abiertos, que significa leer con el corazón en la diaria realidad, la presencia de Dios que nos acompaña en la historia, aunque se manifieste en gente y en pueblos que no se confiesan de los suyos, ni tan siquiera sean creyentes. En todo gesto humanizador está presente el Dios de la consolación. Venga de donde venga ese gesto denota la presencia del Dios de la vida que está fecundando esa pequeña parcelita de su creación. Esta percepción es una invitación a fecundar esa labor a caminar con los extraños en esa tarea. De ahí la invitación que el profeta hace a su pueblo para que se abra a la nueva realidad cultural en el Exilio y descubra a Yahvé como el Dos único de todos. De ahí la invitación a permanecer despiertos  “ Is 51,9; 52,1


 4. Apertura a lo universal “Ensancha el espacio de tu tienda despliega sin miedo tus lonas, alarga tus cuerdas”” Is 54,2

Esta bella expresión parece anticiparse en el tiempo a nuestro actual mundo globalizado en el que los medios de comunicación: Radio, Televisión,  Internet nos ponen inmediatamente en contacto con todos los rincones del mundo, desde la gran urbe hasta la chabola africana. Medios al alcance de todos para entrar en contacto con lo diferente, con otras culturas, otras religiones, El mundo se ha vuelto pequeño, hablamos  de una aldea global, pero no siempre el corazón sigue el mismo ritmo de apertura. La mayor cercanía a lo diferente nos asusta y preferimos eliminar esas diferencias en lugar de integrarlas. Por eso la invitación del profeta a sus contemporáneos nos conviene también hoy y aquí. En contacto con la civilización babilónica, el pueblo se abre a la experiencia de que hay un único Dios que no está ligado al clan o a la patria sino es de todos y actúa en todos con su Espíritu en todos  y por eso Ciro el rey de los persas puede ser considerado servidor suyo para liberar al pueblo de la esclavitud. El que dice “Ciro  tú eres mi pastor y cumplirás todo mi designio” Is 44,28 “Así dice el Señor a su ungido Ciro, a quien lleva de la mano” Is 45,1.  Hoy muchos de los jóvenes que claman por inmundo mas justo. no se consideran cristianos y no obstante entregan sus vidas, corren riesgos para procurar una vida mas justa para todos. Cooperantes, etc.. Jesús en el encuentro con la Samaritana nos aclara: “ Los verdaderos adoradores que Dios ama le adoran en espíritu y en verdad” Jn 4,23.  Y el Espíritu esta en todos. “Toda criatura está habitada por el Espíritu El Espíritu no está ausente de ningún ser humano” S. Máximo el confesor en el siglo VII y ya más cerca de nosotros, el V.II afirma  “Debemos creer que el Espíritu Santo ofrece a todos la posibilidad de que en la forma  de sólo Dios conocida se asocien al misterio Pascual”  G.S. I. 22

La llamada hoy al diálogo intercultural e interreligioso requiere por nuestra parte una actitud de escucha. “El diálogo intercultural requiere tener un corazón puro y una mente abierta” (Paz e interculturalidad R. Panikkar. Herder Barcelona 2006). Podemos decir, una  mente abierta para escuchar y acoger la verdad que nos llega de los otros y un corazón puro para evitar creer estar en posesión de esa verdad, dicho de otro modo una actitud de escucha y un corazón de pobre.


5. Estar a la escucha Cada mañana me espabila el oído para saber decir una palabra de aliento a los abatidos” Is 51,4

Lo que califica al discípulo es la escucha. El discípulo se sabe enviado para anunciar la buena noticia de la salvación. Pero lo que anuncia no es algo propio sino que transmite lo que a su vez ha escuchado. Es algo difícil, Isaías lo sabe y por eso precisa “Cada mañana me espabila el oído para que escuche como los iniciados. Mira el Señor me ayuda”. Tal actitud de escucha supone que se ignora lo que hay que comunicar a los desvalidos. Dios, el Dios de los pobres, el Dios que escucha el grito de los pobres ( Éxodo) conoce lo que hay que decirles, por eso lo nuestro es disponernos a acoger el susurro del Espíritu que en lo interior del corazón nos dice lo que conviene hacer en cada momento. Escuchar al Espíritu que nos habla a través del grito de los hombres, escuchar al Espíritu que nos dicta en el interior del corazón lo que espera de nosotros como respuesta a dar. Escuchar la realidad de la vida en la que Dios está y nos habla invitándonos a unirnos a él para fecundarla. No se trata de huir al monte sino de abrir los ojos a la realidad que nos circunda. Y si en ocasiones necesitamos retirarnos al monte es para agudizar el oído y poder percibir mejor los susurros del espíritu en la realidad que nos está tocando vivir. El profeta nos invita a una mística de los ojos abiertos. La escucha culmina en la acción “para que pueda decir una palabra de aliento a los abat5idos. Tiene un  “para” siempre en la línea del Dios de los pobres, Dios de Jesús el pobre por excelencia, de las Bienaventuranzas.

Escucha y vivirás, es la enseñanza permanente en los profetas sobre todo en Amos. Escuchar la realidad, significa pararnos, algo hoy tan difícil. Vivimos de sensaciones a las que no damos tiempo para que se posen en nosotros y podamos discernir qué viene del Espíritu, qué de nuestros antojos, caprichos. Hay una clave y es vivir en el momento presente. En el actual caos provocado por tanta sensación e información que permanentemente nos va zarandeando de un lado a otro al ritmo de las emociones,  se nos invita a vivir el momento presente. A este respecto el beneficio de la Hora-terapia es decir “ “hacer lo que quiero” y “querer lo que hago” Es el modo de estar en cada momento totalmente en lo que hacemos , es ahí donde damos la vida para ganarla. 

Ignacio de Loyola gran conocedor de la persona, en los ejercicios a la persona que busca ordenar sus afectos invita a escuchar el movimiento de los espíritus que se juega en el interior de cada persona para discernir lo que le conduce a la vida y potenciarlo y le lleva a la muerte para rechazarlo. Tras el discernimiento, la libertad decide

6. Dar la vida para ganarla “Mi siervo inocente rehabilitará a todos, “Is 53,11.

Algo que sorprende en estos capítulos es la  misteriosa figura del Siervo. Es la imagen de una persona  sin figura humana el que es objeto de un cántico y de una admiración y es presentado como verdadero discípulo. De él se dice que su vida entregada redunda en bien de una multitud.. Extraña manera de entender la de Dios sobre el fin de la persona No es el súper- yo, sino el machacado, el sin figura humana el que es objeto del agrado de Dios. “ Este es el hombre” Jn                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                            19,5.  El crucificado es la figura humana, que Dios, nos ofrece como modelo de lo humano, porque ese crucificado es la expresión del amor hasta el extremo. Entregar la vida para darla a otros es la máxima expresión del amor. Algo inaudito, si el mismo Dios no hubiera venido a revelarlo en persona. Su Encarnación y el nacimiento en el despojo de un pesebre culminan en el madero de una cruz. Desnudo al nacer ,despojado y vaciado totalmente de todo querer e interés personal al morir, únicamente puestos los ojos en la realización de la voluntad del Padre, el Reino, ama , ama hasta dar la vida por amor. Esta es la cumbre de la vida cristiana, ya anticipada en los cantos del siervo, que vivió en una época difícil como la nuestra, que no obstante el profeta desea que sea de consolación para los desterrados. La clave de la esperanza es que el pueblo no camina sólo va siempre acompañado por el amor y la ternura de Dios.  

La muerte de este siervo va a redundar en bien de muchos. Algo que se realizará en la muerte y la resurrección de Jesucristo pero que estaba ya incipientemente presente en el anuncio profético.

“Quien da la vida la gana” Mc 8,35 Esta frase expresa en lenguaje evangélico el eje del Principio y Fundamento de los Ejercicios Ignacianos. Significa la culminación de todo un proceso que se inicia en la experiencia personal de haber sido creados por Dios amor con un “para” que busca ser felices haciendo felices a los demás. Para lograr tal objetivo, Ignacio nos invita a tomar conciencia de los propios enganches afectivos y a desear liberarnos para elegir en cada momento lo que más conviene para en todo “amar y servir” Estos mismos pasos son los que hemos ido recorriendo a lo largo de esta charla por la mano del profeta de la Consolación. Su mensaje culmina con una invitación a la esperanza, a la alegría.


 7. Esperar contra toda esperanza “Saldréis con alegría” Is 55, 12

El libro del profeta de la consolación termina con un grito que alimenta la esperanza. “Saldréis con alegría” A lo largo de esta charla hemos evocado los aspectos  que pueden favorecer en nosotros la esperanza. Esa actitud que nos mantiene siempre en tensión hacia lo nuevo que esperamos, hacia la plenitud de la vida que anhelamos. La esperanza es una fuerza motriz que mantiene vivas todas las energías personales, para conseguir lo añorado, lo anhelado, lo esperado y alcanzar un futuro que se sueña siempre mejor sin saber de antemano cómo será, porque se está haciendo. La esperanza no es un conocimiento intelectual es un saborear la vida. Para el discípulo de Jesús el fundamento es la experiencia  de que así como Dios me salvó en otro tiempo,  está ahora conmigo y me ayudará en un futuro. De tal confianza brota el abandono, el deseo de dejarse hacer por Dios, como María en el Magnificat. El anuncio del nuevo ser prometido que va a nacer le mueve a una comunicación  gozosa y agradecida  de las maravillas de Dios en el pasado y a confiar en el presente con el gesto sencillo de  ayudar a su prima Isabel en las tareas de la casa. Siempre abierta a un futuro nos remite a Jesús para ser discípulos “Haced lo que El os digaJn 2,5 y más tarde en los albores de Pentecostés, ora con nosotros para acoger en actitud orante la efusión del Espíritu del Resucitado. Y todo ello vivido en la sencillez de una vida normal, cuya gran riqueza reside en el corazón, habitado por una gran esperanza.  Pero se trata de una esperanza activa que requiere nuestra colaboración. Significa hacer lo que en cada momento creemos que es posible hacer, y hacerlo confiando que ese pequeño gesto animado y fecundado por el Espíritu del resucitado está ya dando frutos. Aunque los ojos no lo perciban el corazón del mundo arde con mayor amor. Es el mensaje del profeta para tiempos difíciles “Algo nuevo está brotando” ¿no lo notáis?

Oración del 18 de noviembre de 2011


SEÑOR, HAZ DE MI UN ANAWIN


Himno: Alleluia alleluia allleuia Slava tiebe boze (Gloria a ti, Señor )

Canto: Oh oh oh oh Jesuchriste oh oh oh oh in te cofido
            ( Oh Jesucristo, en ti confío )

Meditación:
          Hoy se nos habla en la Escritura de la pobreza. Esta realidad se puede entender de muchas maneras. La pobreza evangélica no se reduce a ninguna de ellas. Puede tener su origen en los “pobres de Dios”, que señala la historia de salvación en El Antiguo Testamento: los ANAWIN. . “Hombre pobre, cuya riqueza es tener a Dios. Cree radicalmente en El, y teniéndolo en su ser, le basta para sobrevivir” San Rafael  de Arnáiz. Tal vez descubrieron que todo viene de Él. Nosotros, experimentando la vanidad de las cosas, como ellos, somos conducidos a descubrir lo que hay de permanente en nuestra vida, ahora y para siempre: Dios, su amor por la humanidad, su amor por cada uno de nosotros. El “mundo”, que no conoce a Dios, nos dirá que , al no encontrar respuestas, nos inventamos a Dios. Pero el “mundo” ignora que Dios no es una evasión, sino la respuesta. En el encuentro con Dios, la Verdad se nos impone. Cuando esta Verdad, grabada en nuestras entrañas, se hace consciente en nosotros, los seres humanos ya no estamos interesados en nada más. Nos surge la pregunta: “¿A quién comparar al Señor? Y encontrándonos con Dios, nos encontramos también con la verdad de nosotros mismos, nos hacemos conscientes de a quien pertenecemos. No somos marionetas, pero sí criaturas. No estamos esclavizados, pero sí atraídos irresistiblemente a nuestro centro. Todo viene de Él...Y surge en nuestros labios una oración del corazón: “Guárdame, oh Dios, pues confío en ti, Tú me enseñarás el sendero de la vida”Descubriéndonos pobres ante Dios, experimentamos una alegría serena que nada nos puede arrebatar. Siendo pobres de Dios, podemos comenzar a vivir el Reino ya aquí y hasta toda la eternidad.
         
Canto:
Behüte micht Gott: ich vertraue dir, du zeigst mir den Weg zum Leben.
Bei dir ist Freude, Freude in fülle ( Guárdame oh Dios, pues confío en ti; me enseñarás
sendero de la vida. En ti está la alegría en plenitud. )
         
Del Libro de los Salmos :

Señor mi corazón no es ambicioso ni mis ojos altaneros
acallo y modero mis deseos como  un niño en brazos de su madre.( 130 )
Encomienda tu camino al Señor y confía en Él  ( 37 )     
No confiéis en los príncipes ni en hijo de hombre que no puede salvar.
Bienaventurado cuyo auxilio es el Señor, cuya esperanza está en  Dios ( 146 )

Lectura bíblica:

 

Jesús dice: Bienaventurados los pobres en el espíritu  espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos ... ( Mt  5, 3 )Todo el que haya dejado casas o hermanos o hermanas o padre o madre o hijos o tierras por mi  nombre, recibirá cien veces más y heredará la vida eterna ( Mc 19, 29 ) ... Vosotros buscad primero el Reino de Dios y su justicia y todo lo demás se os dará por añadidura. ( Mt 6, 33 )

Canto: Oh oh oh Adoramus te oh Christe
            ( Te adoramus Cristo )

 

Silencio. Kryrie eleison. Padre Nuestro.

Oración final:

Al igual que María, la madre de Dios, quisiéramos ser los humildes de este mundo, los que preparan los caminos de un porvenir para muchos. Llevamos al Resucitado en recipientes de barro , para que sea evidente que el resplandor viene de Dios, y no de nosotros              Hermano Roger de Taizé


Canto: Magnificat magnificat magnificat anima mea Dominum Magnificat magnificat magnificat anima mea. ( Glorifica mi alma al Señor )   
El Senyor és la meva forÇa el Senyor el meu cant el m’ha estat la salvació
en ell confio i no tinc por en ell confio i no tinc por
Exaudi oratione mea et clamor meus ad te veniat Tu Deus in eternum permanes in eternum permanes ( Escucha mi oración y mi clamor llegue hasta ti, Dios que permaneces eternamente )
Stay with us oh Lord Jesús Crist night will soon fall. Stay with us oh Lord Jesus Christ light in our darkness ( Quédate con nosotros, Señor Jesucristo, la noche está cayendo, Quédate con nosotros, Señor Jesucristo luz en nuestro corazón )
Mi alma te desea en la noche oh Dios mi alma reposa sólo en Dios


Oración del 28 de octubre de 2011


CONFÍA EN EL SEÑOR, SÉ VALIENTE

 

Canto: Confitemini Domino quonian bonum confitemini Domino  alleluia

Meditación


                        Creer en Cristo no es seguir unas normas éticas, sino dar nuestra confianza a Aquél que nos amó hasta el extremo y volvió de la muerte para estar con nosotros todos los días hasta el fin del mundo. Vivir colgado de esa confianza da a nuestra vida libertad y el comienzo de la felicidad aquí en la tierra. Especialmente hoy la Palabra nos invita a una confianza plena en Él. En momentos en que la duda está presente en nuestra vida, en los que nos parece que Dios se aleja, en los que ya hemos perdido la esperanza...Entonces Jesús nos dice: “Confía en mí, aunque no veas, confía. Darle nuestra confianza en estos momentos nos hará avanzar en la fe y también  avanzar en la confianza en los otros

Canto: Bonum est confidere in Domino, bonum sperare in Domino     (Es bueno esperar y confiar en el Señor)

 

Del Salmo 26: Aleluya.

El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré?
            El Señor es la defensa de mi vida, ¿quién me hará temblar?
Aunque mi padre y mi madre me abandonen el Señor me recogerá
            Él me esconderá en el día del peligro,
me ocultará en su morada, sobre una roca me pondrá en alto.
            Confía en el Señor; sé valiente, espera en el Señor.



Lectura bíblica:

Jesús dice a Simón Pedro: Adentraos en el agua
y tirad vuestras redes para recoger la pesca.
Simón respondió: Maestro, hemos trabajado toda la noche
sin recoger ni un pez; pero puesto que tú nos lo pides,
echaremos las redes.                                     Lc 5,1-11


Canto: Wait for the Lord, whose day is near. Wait for the Lord: keep watch, take heart!
          (Espera en el Señor, su día está cerca. Espera en el Señor, mantente vigilante, sé valiente)   Solos:
             1.- Buscad, buscad al Señor, y vivirá vuestro corazón

2.- Preparad el camino al Señor, allanad sus senderos y todos verán la salvación de Dios.

           3.- La gloria del Señor se revelará; toda la tierra verá al Señor
           4.- Rejoice in the lord always; God is at hand. Joy and gladness for those     who seek the Lord. ( Alegraos siempre en el Señor; está cerca; Alegría y gozo para los que buscan al Señor)